jueves, 2 de febrero de 2012

Capitulo Seis: Hola Mallorca.


Narra Olivia.

Hoy era el día, hoy nos íbamos a la casa de Niall de Mallorca, allí nos esperaba diversión a más no poder, pero conforme estaban las cosas entre Emmily y Zayn, algo me decía que habría más de una bronca… Desayunamos todos juntos, y después subimos a terminar de meter las cosas en la maleta. Faltaban quince minutos para irnos ya estábamos todos listos y esperando en la puerta de la casa a que llegara el taxi; no tardó más de siete minutos, metimos las maletas en el maletero y nos metimos en el taxi como pudimos. Al cabo de unos veinte minutos llegamos al aeropuerto, pasamos las maletas por la terminal y nos sentamos a esperar que avisaran nuestro vuelo. Al cabo de estar allí diez minutos, nos avisaron y fuimos corriendo hacia el avión; al subir, Harry y Louis se sentaron juntos, Niall se sentó con una mujer de mediana, Liam y yo nos sentamos juntos, y desgraciadamente a Emmily le tocó sentarse con Zayn…

Narra Emmily.

Cada uno se sentó en sus respectivos asientos, y a mí desgraciadamente me tocó sentarme con Zayn, antes de sentarme respiré hondo y tomé fuerzas, seguidamente me senté, mi reacción le provocó una leve risa.
-          ¿Qué te hace tanta gracia?- pregunté mientras sacaba de mi bolso los auriculares.
-          Tu reacción.- respondió.- Que sepas que me debes algo que esta mañana nos han interrumpido.- añadió susurrándome al oído.
-          Imbécil.- le contesté.
Oí como Harry y Louis se reían al vernos discutir, estas vacaciones se me iban hacer eternas. El avión despegó a los quince minutos de que se llenara; el viaje transcurrió tranquilo, me puse los cascos y empecé a escuchar a “Simple Plan” me relajaba bastante, giré mi mirada para ver por la ventana, ya que yo estaba en el lado del pasillo, cuando me giré le vi allí con el MP4 parecía entretenido, “así me dejará tranquila” pensé. Tenía muchas ganas de llegar a Mallorca, tenía ganas de tumbarme en la arena a tomar el sol, tenía ganas de respirar ese olor a mar salado. Al cabo de unos cuarenta y cinco minutos llegamos y como no, hacía calor, bastante calor; cuando bajamos del avión, nos dirigimos a coger las maletas, al tenerlas en nuestro poder, llamamos a un taxi y nos llevó hacia la casa de Niall. Llegamos al cabo de las cuatro y media de la tarde, ya que allí era una hora más; al bajar del taxi vimos la preciosa casa de Niall. Era blanca, con un montón de ventanales; la casa estaba rodeada por unos inmensos jardines y una valla que se abría. Entramos y dejamos las cosas en el salón, seguidamente nos fuimos a la parte trasera de la casa, había una piscina enorme y unas escaleras que si las bajabas llegabas a la playa. Aquello era precioso, todos corrimos hacia dentro de la casa, nos quitamos la ropa y nos quedamos en bañador, cogimos nuestras cosas y nos fuimos corriendo a la playa. Nada más llegar dejamos las toallas en la arena extendidas, nos echamos un poco de bronceador y los chicos se fueron al agua, mientras Olivia y yo nos tumbábamos boca arriba a tomar el sol, con las gafas puestas.
-          ¡Emmily!- gritaron los chicos desde el mar.- ¡Meteros!
Yo les hice un ademán diciéndoles que ahora iríamos, miré a Olivia, estaba riéndose mientras veía como Liam ahogaba a Louis, me quité las gafas, me hice una coleta y me levanté. Olivia me miró riéndose, acto seguido hizo lo mismo, andábamos tranquilamente hacia la orilla, poco a poco nos fuimos adentrando en el mar, el agua estaba helada, pero a los chicos no les importaba, ya habrían entrado en calor después de estar ahogándose los unos a los otros. Olivia y yo ya estábamos en el agua con los demás, no paraban de gastarnos bromas, cuando me iba a salir, alguien me cogió del brazo, me giré y lo vi allí.
-          ¿Podemos hablar, por favor?- preguntó.
Yo solo asentí, y a él se le dibujó una sonrisa en la cara; salimos los dos del agua y nos dirigimos a unas rocas que había por allí, me senté en una que daba a la sombra mientras que esperaba que él hablara.
-          Emmily…- comenzó a decir.- Sé que soy un gilipollas, pero necesito que me perdones, vale sí, me pasé con lo que dije pero la verdad es que…
-          ¿Es que qué? ¿No es verdad que te tiraste a tu ex - novia mientras yo me hacía tontas ilusiones? ¿Me vas a decir eso?- me cortó.
-          No.- contestó mirando al suelo, tomó aire y clavó su mirada en la mía.- Mentí, le mentí a Harry respecto a eso de que no estaba enamorado de ti, a que no te quería, mentí, porque tenía miedo, miedo de enamorarme más de ti y después cagarla, como he hecho ahora.- confesó, parecía que decía la verdad, pero necesitaba pensarlo.
-          Zayn… quiero pensar… esto ha sido un duro golpe para mí.- le dije, me levanté, pero me agarró de nuevo y tiró de mí hacia él, puso una de sus manos en mis mejillas y me besó.
Me fui de allí, atontada perdida, el beso que me acababa de dar me haría mucho que pensar estos dos meses; volví a mi toalla y me tumbé, pronto un sonido interrumpió mi descanso.
-          ¿Sí?- pregunté al descolgar.
-          Hola cielo.- me dijo mi padre a través del teléfono.
-          Hola papá, ¿recibiste mi mensaje?- le dije.
-          Sí, por eso te llamaba; te tengo que decir una cosa y es mejor que te la diga ahora…- dijo mi padre.
-          Pues venga.- le dije impaciente.
-          Me han ofrecido un trabajo en California, y pensaba en aceptarlo, será solo durante unos años, pero si quieres tú te puedes volver antes a Londres con tu hermana… ¿qué me dices?
-          ¡Es una idea estupenda!  Acéptalo.- le contesté felizmente.- Pero, ¿cuándo nos iríamos?
-          Pues… después de verano, justo para septiembre. Pero te dejo una semana para pensarlo, no me tienes que dar una respuesta ahora…
-          Es que eso es muy pronto papá, y acabo de conocer a gente estupenda…- dije tristemente.- Bueno, yo lo pensaré, ya te daré una respuesta; ahora te tengo que dejar, adiós te quiero.- dije antes de colgar. Él me respondió un “te quiero” y colgué.
Tenía mucho que pensar a partir de ahora, ¿me quería ir? ¿Quería irme a otra ciudad para empezar otra vez de cero? Esas preguntas me iban a rondar la cabeza a partir de ahora, pero no podía pensar en eso ahora. Estaba en Mallorca, en la casa de Niall, me tocaba disfrutar ya pensaría por la noche. Me tumbé en la toalla a tomar el sol, me puse las gafas, y me puse boca abajo, seguidamente apoyé mi cabeza, en mis brazos. Oía a los chicos y a Olivia gritar de la risa, o quejarse por qué le ahogaban entre ellos, de pronto, me vino a la mente el beso que me había dado Zayn minutos antes, había sido dulce, pero eso no me ayudaba a pensar con claridad si quería quedarme. Después de estar un rato tumbada, noté como un cuerpo mojado se tumbaba sobre mi espalda.
-          ¡Ah! ¡Qué frío!- me quejé, giré la vista hacia atrás y vi a Louis reírse.- Louis o te quitas o te quitas.
-          Vale, vale, me quito.- dijo él, nada más quitarse de encima de mí, me levanté y me estiré un poco, estaba muerta de hambre.
-          Tengo hambre.- le dije a Louis.
-          Pues cómete una zanahoria.- dijo contento, le fulminé con la mirada.- De hortaliza, mal pensada.
-          Bueno…- dije apartando la mirada de él.
Me puse a mirar hacía donde estaban los demás, veía como reían y se lo pasaban bien, estaba pensando en decir esta noche en la cena lo que mi padre me había dicho. Me acerqué a la orilla de la playa, y me senté allí para poder respirar un poco el olor a agua salada;  al cabo de un rato, Zayn salió del agua y se sentó a mi lado.
-          Siento lo que he hecho antes, ha sido un impulso que no he podido contro…- empezó a decir, pero le callé con un beso.
-          Ya está, en paz.- dije al separarme de él, eso le provocó una ligera risa.
-          ¿Ya has pensado?- preguntó mirando al horizonte.
-          Te he respondido con ese beso.- contesté sin mirarle, pero noté como su mirada se clavaba en mí, haciendo que dirigiese mi vista hacía sus ojos. Empezó un incómodo silencio, solo nuestras miradas hablaban entre ellas, pero Zayn se levantó e hizo que se iba, pero no era así, me tomó en brazos y después me puso como al “saco patatas” mientras andaba dirección al mar.- ¡Zayn, bájame, bájame!- gritaba mientras pataleaba.
-          Me parece a mí que no.- dijo riendo. Empecé a patalear, pero cuando me quise dar cuenta una ola nos tapó a Zayn y a mí, quedando sentada en su regazo mientras él estaba sentado en el suelo del agua. Me levanté por si venía otra ola.
-          Te lo tienes merecido, por tonto.- le dije riendo.
-          Ahora verás.- dijo levantándose.
Salí corriendo como podía, pero entre las olas y las corrientes no podía correr muy rápido; pronto me agarró por detrás, mientras que yo me agachaba porque me hacía cosquillas, estuvimos un buen rato riendo, quien diría que hace unas horas estábamos como el perro y el gato y ahora estamos mejor que nunca. Al cabo de veinte minutos salimos del agua y nos dirigimos hacia nuestras toallas, pero él se tumbó en la mía, y como estaba cansada me tumbé en la suya. Pasamos allí la mayoría de la tarde, después nos fuimos para la casa a ducharnos y hacer la cena, ya que se nos habían hecho las ocho y media, y aquí en España, empezaba a oscurecer, era raro porque estábamos a principio de verano y habían cambiado la hora, pero bueno.
Subí a la que sería mi habitación, “¡es preciosa!” grité hacia mis adentros, entré y vi una cama de matrimonio en el medio, con un armario a la izquierda de esta, unas estanterías, una mesa y lo más importante, ¡un baño propio!, sin olvidar el inmenso balcón que tenía. Abrí la maleta y empecé a meter la ropa en el armario, los pantalones por aquí, las camisetas por allá; cuando terminé me metí en la ducha, puse la música y alta y abrí el grifo; a los quince minutos salí con una toalla alrededor de mi cuerpo  y una toalla en el pelo, abrí de nuevo el armario y saqué unos short, con una camiseta del hombro caído y unas sandalias, seguidamente, me sequé el pelo y me pasé las planchas. Llevaba bastante rato en la habitación así que decidí bajar ayudar a poner la mesa. Me dirigí hacia la cocina y estaban Liam, Louis y Harry cocinando sin camiseta, solté una leve risa y me acerqué a ellos.
-          ¿Ayudo a algo?- pregunté.
-          No, está todo bajo control.- dijo Harry.
Asentí y salí de la cocina, vi que la mesa no estaba puesta, así que busqué el mantel, los cubiertos y demás y puse la mesa; cuando acabé me salí a la parte trasera, estaba la casa encendida y la piscina iluminada, me encantaba Mallorca y más, la casa de Niall. A lo lejos vi a Zayn, me acerqué sigilosamente y le tapé los ojos.
-          ¿Quién soy?- pregunté poniendo voz grave.
-          Emmily.- contestó.
-          Joder.- respondí quitándole las manos de los ojos y poniéndome a su lado.- listo que eres.
-          Ya ves.- rió.- Emmily.
-          ¿Qué quieres?- contesté mientras me estiraba la camiseta.
-          A ti.- me quedé sin palabras.- Sé que es atrevido, pero ya lo sabes, te necesito conmigo, no soy persona si no estoy contigo. He cometido errores, y los seguiré cometiendo con el paso de los años, pero te aseguró que si estás conmigo no te arrepentirás otra vez, te quiero.- dicho esto, no lo resistí y le besé, este no dudo en devolverme el beso.
Estuvimos un buen rato el uno muy cerca del otro, pero algo nos interrumpió, era Harry diciendo que fuéramos a cenar, nosotros obedecimos. La cena transcurrió animada, entre miradas, risas y tonterías por parte de Harry y de Louis; al acabar de cenar, pusimos todos los cacharros en el lavavajillas y nos subimos a dormir cada uno a nuestras respectivas habitaciones, mañana sería un día largo.

4 comentarios:

  1. Aiiii *_* que precioso, este es el que más me ha gustado sin duda!<33

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  2. Te lo digo así de claro: ME ENCANTA. En serio, ni se te ocurra dejar de escribirla porque me moriria D:

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    1. Jajajaja me alegro de que te guste :D No tranquila, no la dejaré (:

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